Otra vez aquí
preocupado por el lenguaje
la comunicación de las ideas,
los sentimientos,
la mejor forma de hacerlo.
Dudando entre lanzar
con prontitud un dardo certero
directo al corazón, al pensamiento
o una andanada de palabras
ordenadas de tal forma
que derriben suavecito
barrera tras barrera
hasta vencerlas todas
para llegar al pensamiento
al corazón
por último.
Celebro la palabra dardo
la que suple y gana
al discurso ampuloso,
la palabra económica
precisa, la que toca al corazón
al pensamiento.
Hablo de la palabra tuya
la que algo te dice
la que te espanta
la que ansías
la que añoras.
La palabra extraviada
en un vagaroso
quiebre del camino
mi palabra que hallo
al encontrar la tuya
nuestra palabra.
Hallada la palabra
hablemos
sin máscaras
sin escudos
solo el corazón
y su soledad acompañada
por nuestra palabra.
con su permiso, me lo llevo a mi pagina.
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